La vida es un constante riesgo de morir, no importa dónde estemos, qué estemos haciendo, en qué lugar del mundo nos encontremos , siempre existirá la posibilidad de morir, de manera natural , por un accidente, un desastre natural, un atraco que salga mal, en fin cualquier cosa podría acabar con nuestro frágil cuerpo humano.
Supongo que si en algún momento la muerte toca nuestras puertas, pues pararemos de sentir pero la pregunta más importante es, ¿ qué sucede con nuestros hijos, nuestra esposa(o), nuestros padres?, allí empieza a radicar la importancia de un seguro.
¿Tú familia esta protegida?
Varios gastos pueden ser difíciles de manejar para las familias que no están preparadas para catástrofes. Gastos de funeral, deudas por pagar y gastos diarios para vivir son ejemplos de gastos que hay que cubrir después de un evento desafortunado.
La economía general de nuestro país tiene problemas, pero no hablamos de la del gobierno sino de la de sus habitantes, tenemos unas finanzas débiles, si dejarás de trabajar hoy, ¿cuántos meses podrías vivir sin seguir haciéndolo?, la respuesta de la mayoría de nosotros no pasa de tres meses, ahora imagina ese escenario si tuvieras una incapacidad o la falta del proveedor de tu hogar que cortará indefinidamente tus ingresos mensuales.
¿Y qué pasa con tus bienes?
Nuestra sociedad basa el éxito financiero en tener una bonita casa y un lindo auto, además de tener el dinero suficiente para vacacionar con nuestras familias. Todo esto lo conseguimos con un gran esfuerzo, pero imagina un accidente en el que puedas perder tu casa o uno más probable un accidente donde puedas perder tu vehículo, un robo o cualquier siniestro que desaparezca lo que has ganado con el sudor de tu frente, entonces, ¿no es mejor tener un seguro que nos proteja de cualquiera de estas perdidas?.